EL GOBIERNO DE LA COMUNIDAD DE MADRID SE TOMA CON MUCHA CALMA EL TRANSPORTE PÚBLICO
– Ralentiza los plazos de ampliación de la línea 11 de metro
– Ofrece tan sólo un autobús de refuerzo para compensar las largas esperas y aglomeraciones en la línea 34 de la EMT
El 21 de septiembre de 2017 la entonces presidenta de la Comunidad de Madrid anunciaba el proyecto de prolongación de la línea 11 de metro desde Plaza Elíptica hasta Conde de Casal. El coste estimado era de 285 millones de euros, con una previsión de puesta en funcionamiento para 2023.
El 11 de diciembre pasado (27 meses después), el Vicepresidente de la Comunidad de Madrid anuncia que las obras incluirán una estación en el barrio de Comillas, elevando el coste total estimado a los 410 millones de euros y con un plazo de ejecución de 45 meses (o sea, hasta 2025).
En poco menos de dos años, y sin que todavía se hayan empezado las obras, el presupuesto crece más de un 40% y los plazos un 33,3%. Ni la nueva estación justifica este sobrecoste, ni la celebración de las elecciones (que por supuesto eran conocidas) la demora de dos años más.
Estos datos fueron confirmados por la Vice-consejera de Transportes de la Comunidad en la reunión celebrada con la Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto el pasado 18 de diciembre. Y todo ello a la espera de la contestación escrita a las alegaciones presentadas al proyecto allá por el mes de julio pasado.
El trasporte en superficie no corre mejor suerte. Como es conocido, esta Asociación de Vecinos realizó un detallado estudio de la frecuencia de paso de los autobuses de la línea 34 a lo largo de todo un día (13-11-2019), cuyos resultados están publicados en el siguiente enlace: https://carabanchelalto.org/informe-control-de-la-linea-34-de-la-emt. Una de las principales conclusiones era que se necesitaba, al menos, un incremento de 10 autobuses en la línea para que sus frecuencias de paso fueran similares a la línea 27, que también fue objeto de estudio ese mismo día.
La razón de comparar estas dos líneas es porque se trata de las que más viajeros transportan de toda la red de autobuses de la EMT (de nuevo en 2019 la línea 34 es la primera con 8,98 millones de viajeros y la 27 la segunda con 8,23 millones), prestándose el servicio en ambos casos con autobuses articulados.
Sin embargo la respuesta que el Consorcio Regional de Trasportes de la Comunidad de Madrid da a esta situación de largas esperas y continuas aglomeraciones que se producen en la línea 34 es la de dotarla con 1 solo autobús más: Eso y nada, es prácticamente lo mismo. Alegan falta de medios, pero no explican el por qué unas líneas (por ejemplo la 27 que recorre el eje financiero y de oficinas) están mejor dotadas que otras (como la 34 que da servicio a barrios populares y periféricos)
No podemos admitir estas demoras e insuficiencias en un transporte público del que no sólo se benefician las vecinas y vecinos de Carabanchel Alto, sino de buena parte de la ciudad, y cuya mejora contribuiría a reducir el uso del vehículo privado y por lo tanto de las emisiones de CO2.
Madrid, 21 de enero de 2020.
Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto