Ayer día 27 de octubre con motivo de la celebración del día del TDAH en
España la ciudad de Valencia se ilumino de color naranja, este año con la
iluminación de cuatro grandes edificaciones emblemáticas , el ayuntamiento
de Valencia, el Palau de la Generalitat, la Porta de la Mar y en la
Ciudad de las Artes y las Ciencias, la puerta del museo
Principe Felipe y la Playa del Hemisferìc.
Durante todo el día las asociaciones de TDAH de la capital ,
APNADH y TDAH más 16 Valencia estuvieron dando
información al respecto en una mesa informativa donde
fueron visitados por diferentes autoridades como el alcalde de Valencia.
Durante mucho tiempo se ha considerado que se trataba de
un trastorno que afectaba exclusivamente a la infancia, pero la evidencia
clínica muestra que al menos el 30% de los niños y de los adolescentes que
han sido diagnosticados continúan presentando síntomas significativos en la edad adulta.
Se calcula que Ia prevalencia del TDAH en la Comunidad valenciana es del
6,4% en niños y, al menos, un 3% en adultos. Pese a ello, hay
que destacar la existencia de una gran reticencia por parte de algunos clínicos, profesionales sociales, como de
educación para reconocer el trastorno y valorar las consecuencias que ocasionan en el día a día a los afectados.
Todo ello repercute negativamente en las personas con TDAH, dado que sin
un diagnóstico certero, no cabe esperar un tratamiento correcto que se
ajuste a las necesidades y características individuales.
No olvidemos que el TDAH es uno de los trastornos psiquiátricos que con
mayor frecuencia se manifiesta, ademas de con comórbilidad a muchos
otros como el TND, ansiedad, depresión…
Es de vital importancia, que las personas afectadas por TDAH tengan
acceso a tratamientos multimodales en todas las edades, lo que sin duda
facilitará su integración social, escolar y laboral, reduciendo en la inmensa
mayoría de los casos el riesgo de presentar una patología dual en la edad
adulta (Trastorno + adicciones) como una de las más graves consecuencias.
Recordemos que muchos estudios mundiales demuestran que el 3o% de Ia
población reclusa de todo el mundo presenta un TDAH no diagnosticado en
la infancia.
