La Confederación General del Trabajo (CGT) del País Valenciano y Murcia tilda de “vergonzosa” la concesión de una medalla de oro por parte del Ayuntamiento de Vila-real al colegio de los carmelitas al que varios alumnos han denunciado por abusos en los años 70.
El Ayuntamiento de Vila-real con los votos a favor de PSOE, UP, PP, VOX y Ciudadanos han acordado otorgar una medalla de oro al colegio de los Carmelitas, a pesar de la denuncia sobre abusos a los que fueron sometidos varios ex alumnos por parte Francisco Armell, tal y como relatan 5 ex alumnos del antiguo seminario que se muestran “indignados”. La Confederación General del Trabajo ha querido mostrar su apoyo a las víctimas de estos abusos y tilda de “vergonzosa” la concesión de este reconocimiento institucional.
La actitud del Ayuntamiento de Vila-real contrasta con lo ocurrido en Xàbia, Alacant, municipio del que era natural el sacerdote Francisco Armell y que después de conocerse las denuncias se puso manos a la obra para retirarle el premio honorífico que le concedieron en 1999.
Adolfo, militante de CGT, víctima de estos abusos, no se explica como todos los partidos, excepto Compromís que votó en contra, están de acuerdo con la decisión de conceder este reconocimiento a “una institución que no es capaz ni de pedir perdón por lo ocurrido, no estamos pidiendo ni tan solo compensación económica, a la que por cierto tendríamos todo el derecho”. Adolfo también muestra su estupefacción ante quienes les reclaman pruebas de lo ocurrido “que quieren que guardemos los calzoncillos sucios de los años 70” se pregunta.
Los ex alumnos tienen claro que no van a parar hasta que reconozcan lo que allí ocurrió y no van a dejar de denunciar “la hipocresía del Ayuntamiento de Vila-real y los partidos que apoyan la concesión de esta medalla”.