Madrid, 21 de octubre de 2024 – El Partido Animalista PACMA ha lanzado este lunes un vídeo a través de sus redes sociales en el que documenta el origen de una gran parte de los jabalíes que mueren en los cotos de caza en España. Este vídeo desvela cómo, mientras se autorizan matanzas de jabalíes tachándolos de plaga, muchos de estos animales provienen de granjas cinegéticas, siendo criados específicamente para luego ser cazados. A pesar de que algunos de estos cotos son considerados «abiertos», los cazadores alimentan deliberadamente a los animales en estas zonas para crear una querencia.
Javier Luna, presidente nacional de PACMA, pone de manifiesto que la caza, «lejos de ser una herramienta efectiva para regular poblaciones de animales, responde únicamente a una necesidad de diversión de un sector minoritario».
Para la formación política, la creación artificial de sobrepoblación mediante la cría en granjas cinegéticas y la alimentación en cotos no es más que una estrategia para justificar la caza, mientras se continúa argumentando erróneamente que se trata de una medida de control poblacional o regulación de los ecosistemas. «En realidad, la caza no cumple ninguna función útil en nuestros días: los ecosistemas son capaces de autorregularse y existen métodos éticos y científicos para gestionar las poblaciones de fauna sin recurrir a la violencia y el sufrimiento animal», argumentan.
«Lo más alarmante es que, a raíz de esta falsa justificación de «sobrepoblación», se están autorizando batidas de emergencia, permitiendo matar jabalíes sin ningún tipo de restricción, incluyendo hembras embarazadas y crías, como ha ocurrido recientemente en Galicia», añade Luna, tachando este enfoque como un acto «cruel e incoherente».
PACMA reitera que la caza «no es ni puede ser una solución viable ni ética para la gestión de la fauna»: «en lugar de proteger los intereses de un grupo reducido de personas que disfrutan matando animales, las autoridades deberían apostar por métodos no letales, como la esterilización o los planes de control ético basados en la ciencia, entendiendo la raíz del problema y no parcheándolo».