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Texto: Ángeles Sanmiguel

“Las mujeres  con discapacidad tienen más probabilidades de sufrir violencia de género” apunta la médica sexóloga Charo Ricart. “La falta de formación  y servicios adaptados, así como el estigma, limitan  su derecho a mantener  relaciones seguras”. ¿Algún aparato institucional  tomará cartas  en el asunto?

Tal parece que cualquier tentativa de normalizar la sexualidad en mujeres con discapacidad es quimérica. ¿Qué hay de los derechos inherentes  a la naturaleza de cada individuo? Pasan los años, las décadas, las centurias y el ciclópeo muro de intransigencia, oscurantismo  e ignorancia  sigue aislando a mujeres  con discapacidad  del resto de congéneres.Sin implementar  herramientas  poderosas que ofrezcan un equilibrio sexoafectivo satisfactorio a mujeres discapacitadas toda demagogia es vacua. Frida Kahlo pintora mexicana, HellenKeller escritora y feminista estadounidense  sordociega,  SylviaPlath poetisa estadounidense  bipolar, Debbie Van Der Putten modelo holandesa con un brazo amputado, AimeeMullins  actriz y modelo estadounidense, campeona paralímpica,  con prótesis cuántica, Rebekah Marine   maniquíde pasarela biónica, Virginia Wolf novelista inglesa bipolar, Lola “influencer” santanderina  con movilidad reducida,Desirée Vila atleta gallega, Vitória Bueno bailarina brasileña de ballet sin brazos que arrolla en Instagram y numerosas “tiktokers”monetizadoras  con su pedagogía sobre la discapacidad en el siglo veintiuno son algunas de las muchas  mujeres con discapacidad que demuestran coraje  e inteligencia a través  del tiempo.

Esgrime Ricart que “a la sobreprotección  y a la falta de información sexual se suma el escaso  apoyo por parte de las instituciones. Desde los poderes públicos se ha prestado  poca atención a la sexualidad de las personas con discapacidad”.A su vez, tanto entornos sociales,tribales o  cosmopolitas, proclaman y dictan lo acomodaticio a sus intereses, sean  colectivos  comodomésticos.¿Atropellos dogmáticos reglando la discapacidad en la mujer? ¿Horripilantes y aterradoras situaciones sectarias silenciadas? ¿Eludir aspectos calificados de controvertidos, como la discapacidad, en rituales del poder? “Las personas con discapacidad han visto mermadas muchas veces su autonomía y su capacidad de decisión”.¿Por qué  personas e instituciones que manejan vidas obvian cualquier  sexualidad y placer a mujeres tanto jóvenes como adultas por decreto? Mujeres con discapacidad  tienen derechos ycensurar  experiencias psicoafectivas–que es uno de ellos-, no es más que  la autoritaria práctica de fijar límites, que en versión paternalista se traduce en  supervisar  y censurar. Según dictamina Abigail Reiman, ¿“Nos hemos estado desvalorizando a nosotras mismas”?

“Ellas también” es el documental presentado  el tres de diciembre  de dos mil veinticuatro  en la Sala Carolina de València, teatro bautizado en honor a la joven hija fallecida de su propietario.  Mediante la colaboración  de Cinesin y Sexualidad Funcional un nuevo trabajo audiovisual  aborda un arraigado tabú, ofreciendo “una mirada íntima  y sincera sobre las experiencias de diversas mujeres  con discapacidad en relación  con su sexualidad a lo largo de sus vidas”. Testimonios y experiencias personales iluminan una faceta ensombrecida a través del tiempo,estigmatizaday perseguidaen  criminales dictaduras  y regímenes teocráticos. Si el patriarcado instituido esclaviza, silencia y cosifica a la mujer, ¿qué grado de abuso no se  infringirá a mujeres  con discapacidad? Mujeres a las que no  se les reconoce y respeta su sexualidad por contra son  violadas generalmente en entornos cercanos.

“Muchas mujeres con discapacidad crecen bajo un falso sobreproteccionismo que limita su desarrollo sexual como mujer y el poder desarrollar  el deseo propio, las mujeres con discapacidad han visto mermadas muchas veces  su autonomía y su capacidad de decisión”. ¿Infantilización  que dificulta  “una vida sexual plena”?“Añadimos a esto  una falta de educación sexual  e información  y con un peor acceso  sanitario y de violencia obstétrica  o viendo impedido, en muchas ocasiones,  su deseo de maternidad, a menudo por la presión social pero  también familiar” refiere la doctora.

El psicoanalista  Sigmund Freud quien debido al cáncer de paladar murió eutanasiado por su médico con tres inyecciones de morfina aseveraba que:“Para explicar las necesidades sexuales  del hombre (y mujer) y del animal  supone la Biología la existencia de un instinto sexual”. Como término la ciencia utiliza la palabra libido.¿Por qué  calificar de  compulsión morbosa la libido en la discapacidad? “Las mujeres con discapacidad  se enfrentan  a la doble discriminación en la  sociedad patriarcal y eso conlleva  que sean otros los que tomen decisiones  sobre su vida afectivo/sexual, sus relaciones y su placer vulnerando muchos  de sus derechos sexuales y reproductivo”, afirma la facultativa.

Talleres sexoafectivos se vienen realizando con un alto grado de satisfacción por partede las usuarias. Discapacidades físicas y orgánicas, ceguera, sordera síndrome de Down, parálisis cerebral, daño cerebral adquirido, enfermedades raras, salud mental, espina bífida y un largo etcétera existen, al igual que los derechos  en la totalidad de las personas

Desde la productora del documental se informa que “se exploran temas como el despertar sexual, la educación limitada en materia  sexual, la exploración del propio cuerpo  y la importancia de la masturbación  como forma de autoconocimiento  y liberación”. En él “las protagonistas comparten sus vivencias  sobre la maternidad, los desafíos enfrentados  en el sistema médico, y la búsqueda de información y apoyo  en un entorno a menudo marcado  por tabúes y prejuicios”.

Indudablemente el sumum de una dictatorial atrofia comprensiva rayana en la absoluta  ignorancia fundamenta la eliminación de cuanto  no interesa gestionar a ningún nivel, y es obvio que en dictaduras como el patriarcado o  cualquier  otra, la salud psicosexual, la  educación  sexual siempre supone  un peligro  para quienes  instituyen, defienden y viven del tabú, de cualquier tabú. “Nadie me había preparado para… pues mira, te va a bajar la regla a partir de tal edad”. “Les falta ponernos la letra escarlata”.

Mujeres con discapacidad  además de  enfrentarse a sociedades que no  entienden  o no quieren entender  que  existen deseos en la discapacidad, anulan de golpe la biología humana y cualquier tranceque no sepan o no quieran  manejar como la integración en el ámbito laboral de la discapacidad, de las mujeres con discapacidad. La sensibilización esmínima. ¿Cuánta violencia de género  se esconde  bajo una discapacidad?

¿Se medica farmacológicamente  a mujeres con discapacidad  para reprimir su libido? ¿El tabú  por la sexualidad  es igual  en mujeres con discapacidad que tienen pareja y en aquellas que no la tienen? ¿Por qué ciertacuota de sociedad y algunos partidos  políticos  tratan la sexualidad  en mujeres con discapacidad como algo pornográfico, obsceno, abominable? Las crudas realidades  de las mujeres con discapacidad  abarcan  también su sexualidad y el respeto a su cuerpo y deseos sexuales. Una sexualidad que no tiene por qué centrarse   en el coito, existe la masturbación, el cunilingüismo, las caricias, el voyeurismo. R.E.L. Masters y Eduard Lea, sendos escritores estadounidenses, sentenciaríanque reprobar tales actividades “es estúpido e injusto”.

Unbien pergeñado discurso etiqueta  a las personas por su estado de salud mental o físico, clasificándolas  y anulando cualquier posible disidencia para con los protocolos establecidos para ellas.“Sensualidad sepultada bajo capas de temores” escribía la feminista  Dacia Maraini. Acceder a una sexualidad distinta es posible. El recientemente fallecido terapeuta  corporal  y acompañante íntimo Dimitri Zorosen sus charlas preconizaba el “ofrecer espacios de seguridad”  para poder mediante  este recurso, el acompañamiento íntimo,  desarrollar la sexualidad en mujeres  con discapacidad. “La sociedad ve a las personas  con discapacidad como inactivas  o incapaces sexualmente, como seres desexualizados, que no tiene hijos, que no pueden cuidar, que son una carga  y que en cualquier caso no pueden ser deseados por otros” es la consistente sentencia de Ricart. María Monahanversificaría: “Piensa como un río, piensa como un arroyo dejando que tus pensamientos  fluyan hacia un sueño posible”.

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