La plataforma ciudadana y municipalista Totes amb Burjassot anuncia que se adhiere a las reivindicaciones del AMPA del CEIP San Juan de Ribera y reclama unas instalaciones dignas para el alumnado y el profesorado del centro. El colegio público, cuyo edificio fue declarado en estado de ruina económica hace unos cuatro años, retornó por fin a su ubicación original el pasado 25 de abril tras un largo periodo de intensas acciones reivindicativas para conseguir que Conselleria, principal responsable, habilitara unas infraestructuras acordes a las necesidades del centro, un hecho que fue ampliamente celebrado por la dirección del centro, padres y madres, profesorado, alumnado, el Ayuntamiento y fuerzas políticas como Totes amb Burjassot y otras.
Sin embargo, y a pesar de las obras para acondicionar el centro finalizaron con hasta ocho meses de retraso, desde Totes amb Burjassot denuncian que los barracones que Conselleria prometió y, en principio, uno de los motivos principales por los cuales se retrasó tanto la reapertura del centro, todavía no han sido colocados y no hay previsión de cuándo esto sucederá. Además, el lugar donde van los barracones está rodeado de una valla metálica de obra paralela en parte a una de las rampas de acceso al patio que pueden suponer, a juicio de la plataforma, un peligro para el alumnado, que puede intentar escalarla o caerse cerca y hacerse daño. Por último, parte del patio próximo a estas vallas, como es la cancha de baloncesto, no ha podido ser acondicionado por el Ayuntamiento a la espera de que los barracones estén colocados, con lo que representa un peligro adicional.
Así, Totes amb Burjassot se suma a las quejas del AMPA del colegio San Juan de Ribera en este sentido, que denuncia el incumplimiento de Conselleria al abrir de nuevo el edificio sin los barracones y en el cual faltan muchas adecuaciones y mejoras que posibiliten unas instalaciones seguras y de calidad, que podrán afectar también al número de matriculaciones del centro, cuya jornada de puertas abiertas se realizó los días 10 y 11 de mayo, ya de por sí disminuida al punto de que Conselleria ha manifestado la voluntad de cerrar una de las unidades de 3 años y otra de 4 años. Por último, tanto Totes amb Burjassot como el AMPA, reivindican la construcción de un nuevo edificio para el colegio y alegan que, si bien la construcción de barracones y las obras realizadas hasta ahora eran necesarias, no pueden ser una medida definitiva si se quiere abogar por una educación pública y de calidad.