Vecinos de Paterna y asociaciones animalistas, con el apoyo de varias formaciones
políticas, se concentraron en la tarde de ayer a las puertas del Refugio Municipal de
Animales para pedir que vuelvan a activar el programa de voluntariado.
Paterna, 18 de mayo de 2023
Alrededor de las siete de la tarde comenzaba una concentración con el objetivo de que la
actual gestión del refugio municipal de animales de Paterna, ejercida por la empresa
municipal GESPA, vuelva a admitir actividades de voluntariado, suspendidas desde
diciembre de 2021. En la concentración hubo además reivindicaciones acerca la gestión del
refugio, los asistentes reclamaron una gestión ética y transparente, que fomente las
adopciones y promueva actividades sociales.
La actual gestión vive un conflicto con el voluntariado desde el 2020, cuando comenzaron
las quejas por la restricción de la actividad de los voluntarios así como por algunas de las
decisiones tomadas por los responsables relacionadas con las condiciones de vida de los
animales. Estos desacuerdos tuvieron un punto de inflexión en diciembre de 2021 cuando la
empresa Gespa anuló toda actividad de voluntariado y restringió el acceso al refugio a
cualquier persona sin cita, algo que continúa a día de hoy. Desde entonces el antiguo grupo
de voluntarios, junto con asociaciones animalistas han denunciado públicamente la
opacidad y la falta de compromiso de los gestores con el bienestar de los animales. Hace
unos días, la asociación de voluntarios animalistas Vínculo Animal, denunciaba
públicamente que el refugio incumple la ley valenciana de bienestar animal, aprobada el 13
de marzo de 2023, que obliga a los refugios a tener programas de voluntariado.
A la concentración acudieron los antiguos voluntarios del refugio, así como vecinos de
Paterna, asociaciones animalistas locales y regionales y representantes de Compromís per
Paterna y Partido Popular de Paterna. Durante la concentración se realizó un pequeño
debate en el que los voluntarios expresaron sus reivindicaciones. “Más del 50% de las
adopciones venían del voluntariado y de las puertas abiertas. Un refugio hermético donde
no hay voluntariado, donde no hay público y donde no hay movimiento… los perros están
condenados ahí”, aseguraba Mara, visiblemente emocionada, ante el resto de
concentrados.
Los representantes políticos, por su parte, se comprometieron a cambiar la situación y
promover una gestión de los animales de puertas abiertas, en la que prime la transparencia
y se recupere, no solo el voluntariado, si no las actividades sociales que estos promovían y
que han desaparecido, como charlas en colegios y visitas a residencias de ancianos, entre
otras.