10 pollitos se salvaron de la muerte el pasado jueves justo antes de su entrada al matadero. Ante él, activistas del colectivo antiespecista València Animal Save realizaban una vigilia para documentar las condiciones en las que llegan los animales.La asociación, que tiene grupos a nivel internacional, se ha hecho cargo de las crías que serán reubicadas viviendo el resto de sus vidas en paz.
Respecto a la vigilia, el colectivo documentó como los animales llegaban en condiciones de hacinamiento, suciedad y heridas, recalcando que esos animales, pese a su tamaño, tienen apenas 40 días de vida.Además, señalan que la corta vida de estos animales también les supone muchísimo sufrimiento, ya que viven en naves industriales donde permanecen hacinados, sin ver la luz del sol y en condiciones de extrema suciedad.
«Las vigilias sirven para poder hacer llegar a la sociedad una realidad muy oculta: la que los animales padecen cada día. Y eso a pesar de que la ciencia, nutrición y todas las fuentes expertas ya han demostrado que no necesitamos consumir animales y derivados. Entendemos que una convivencia diferente con todas las especies de animales es posible y necesaria», señala Jose Ferrer, uno de los coordinadores de València Animal Save.
Promueven el veganismo como solución al sufrimiento de millones de animales.
En un comunicado señalan que el veganismo es una filosofía basada en la ética y que se puede aplicar en cualquier etapa de la vida rechazando la explotación animal en la alimentación, vestimenta, entretenimiento, experimentación o toda forma en la que esto sea posible. «En cuanto a las alternativas vegetales, cualquier receta de toda la vida se puede imitar sin consumir productos de origen animal y además, descubrir otros sabores nuevos», explican.
Diego Nevado, colaborador de prensa, señala la necesidad de que el consumidor visibilice lo que está pasando y pone el foco en el vacío narrativo existente.
«Si hubiera más información de que se puede vivir perfectamente evitando esta situación y si estas imágenes se vieran más a menudo, mucha gente optaría por un cambio. La situación de los animales explotados se distorsiona desde los libros escolares a las televisiones y cualquier otro lugar y por ello, es también una cuestión de que todo está oculto y es como si no sucediera», opina.
Por último, añaden que más allá de la lucha por la liberación animal, que es el foco del antiespecismo, las industrias suponen una de las mayores causas de la crisis climática, problemas de salud e incluso hambre en el mundo, como ha señalado la ONU afirmando que una alimentación 100% vegetal es necesaria para salvar al mundo del hambre, crisis climática y escasez de combustible.
Cada vez más alternativas vegetales y nutritivas
Keoni (vegano casi 10 años) explica:
«Estamos aquí diferentes activistas de forma voluntaria porque sentimos que es una obligación moral hacer lo que podamos una vez sabemos lo que está ocurriendo. La industria miente sistemáticamente y oculta la realidad que tan injusta es para los animales que hoy vemos entrar al interior de este matadero y ocurre de igual manera en todos lados y no hay diferencia sea cuál sea la zona porque el fin es el mismo, matar. Hay que hacer frente a las injusticias independiente de su ámbito ya sea guerras o otros y en consecuencia, el veganismo siempre será justicia. Cuando di el cambio, no existían tantas alternativas como ahora, pero consideraba que igualmente, no era justo condenar a los animales a esta miserable realidad por el placer de mi paladar».
Uno de los actos más impactantes que cada año realizan desde València Animal Save es el día de los derechos de los animales, que tendrá lugar en la plaza de la Virgen el 10 de diciembre dando voz a todas las especies y en la que se podrá participar escribiendo por redes sociales a «València Animal Save». Se espera gran participación, como en anteriores ocasiones.
Nota de prensa 17/diciembre/2023 en Algemesí