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Texto: Ángeles Sanmiguel

“¡Cero!”. Ese es el apoyo monetario para personas con Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad. “Sólo existe una ayuda económica a nivel académico pero con condiciones”. Cualquier colegial y alumnado juvenil solo es considerado merecedor  de dichas cantidades si“ a su diagnóstico le acompaña un grado de discapacidad.

Imagino que por cuestiones económicas el Gobierno  ha decidido que nuestros estudiantes no tengan las mismas posibilidades que cualquier otro, ni se plantean que esto es invertir en el futuro del país”, esgrime la presidenta de TDAH+16 València María Elena Podio. Tal parece que es inconcebible revocar el abandono de ciertos colectivos  y la instrumentalización por parte de las respectivas y concernientes Administraciones publicasen lo tocante a programas docentes, leyes de educación y estructuras presupuestarias que, década tras década, patentizan una deprimente perspectiva para con la diversidad y por consiguiente la formación respetuosa en individualidades. “Este año, por primera vez,-el grado de discapacidad para tal ayuda es- de un veinte por ciento porque, desde hace años, se requería  tener reconocido un treinta y tres por ciento  de discapacidad”. Despachos políticos continúan mariposeando ante el persistente apremio por una prestación que, “difícilmente, se le concede a una persona  con el diagnóstico de TDAH solo”. Burlones “sillones”, jerarquitas de veinte metros cuadrados y profesional es nebbish (de voluntad débil) son ingredientes básicos para cualquier reducción partidista en los fogones del arbitraje donde surgen drásticas infravaloraciones eso cuando no se encandilan en lo insípido para con el resto de la población desconsiderando, en infinitos casos, –si estos no son mediáticos-,cualquier singularidad y derechos.

“El TDAH  por sí solo, reconocido hasta por el Tribunal Superior  de Justicia, si tiene  necesidad de apoyo educativo” ¿por qué no se le considera? “Otra posibilidad de que se conceda esta ayuda es que al diagnóstico de TDAH se le sume el de trastorno grave de conducta”, puntualiza Podio quien afirma que “esto está produciendo una impotencia en el sector  que nadie es capaz de imaginar”. Sigmund Freud médico psicoanalista, austríaco, relata que un niño en su consulta “escuchaba y comprendía, pero no se interesaba por nada. Su clara inteligencia se hallaba como secuestrada por las fuerzas  instintivas” esas tan precisas para la supervivencia ante entornos hostiles o circunstancias absorbentes.

“¡A quien corresponda!: Si las personas son formadas arreglo  a sus necesidades sin duda devolverán con creces lo invertido y no ocurriría lo que está ocurriendo  en la actualidad que las personas que no han sido formadas según sus características son personas que jamás llegarán a producir  lo que su potencial sería capaz de producir de haber sido atendida en su individualidad”. “¡Aquí lo dejo!”. La citada responsable de la única asociación a nivel nacional que atiende  a personas adultas, a partir de dieciséis años, con TDAH, trastorno conceptuado como infantil, es madre de dos hijos  con TDAH  estudiantes de sendas carreras. En un podcast declara que: “Según van creciendo los chavales  se agravan si no están tratados”. TDAH+16 València actualmente celebra  su décimo  aniversario y, el doce de octubre ha programado su quinta carrera solidaria y reivindicación de “¡que la OMS (Organización Mundial de la Salud) nos reconozca un día mundial!”, aunque, “creo que me moriré sin ver este reconocimiento que tanto precisamos”. Podio relata que en dos mil doce emprendió, “en solitario,  una campaña para que la OMS  nos concediese un día mundial  para la concienciación  del TDAH, pero las limitaciones en un emprendimiento de este nivel hizo que delegase en asociaciones nacionales”, posteriormente “la Federación  Española de Asociaciones  (FEAADAH), llevó la propuesta a la Federación Europea (ADHD Europe), en ese momento perdí de vista la campaña  a la que le había dedicado tres  años de mi vida en cuerpo y alma, incansablemente, por redes sociales y a pie de calle”. Su coraje la llevó a recorrer “medio país ”costeándose los viajes y “con la ayuda de la mayoría de asociaciones del país se recogieron miles de firmas que en este momento no sabría decir quien las tiene custodiadas, ni por qué no las hizo llegar a su destino”.

¿Por qué en los colegios niños y niñas con TDAH “empiezan a ser excluidos”? Hay que  comunicar a los cuatro vientos que mediante concienciación, tratamiento y soportes se canaliza el trastorno hasta el punto de lograr “una vida totalmente normalizada”. ¿Existen buenas prácticas para con el TDAH? ¿Hay respaldo  multisectorial humano o el persistente déficit de atención es motivo de exclusión? Sören Kierkegaard filósofo y teólogo danés de mediados del siglo diecinueve sentenciaría: “Si me clasificas o me etiquetas, me niegas”. ¿Y cuál  es la principal estrategia en los círculos dominantes? ¡clasificar! ¡etiquetar! ¿Y en mensajes inter personas manipuladas? ¡clasificar! ¡etiquetar! ¿Se implementan desarrollos no normativos en  la enseñanza para otras capacidades? “A nivel académico si existe un protocolo de atención al alumnado con dificultades de aprendizaje donde entraría el TDAH, pero también es un ¡protocolo cogido  con pinzas !es muy difícil que se reconozcan  las dificultades que tenemos las personas con TDAH”. Tampoco en otros espacios existen las suficientes nociones al respecto del TDAH, “muy pocas personas, incluso profesionales del ámbito sanitario  o de la educación, están  lo suficientemente formadas para prestar la ayuda que precisamos”.

Es en el ámbito sanitario donde “estamos peor, la mayoría de profesionales siguen pensando que el TDAH adulto no existe y se diagnostica todo menos la raíz de los síntomas” Podio sabe que “un adulto (con TDAH) cuando llega a una consulta médica está ya muy deteriorado  y le cabe cualquier diagnóstico  en su mochila”. “¿Cómo  pensar que las administraciones públicas lo harán sin ningún conocimiento  de nuestras necesidades reales? por lo tanto, no existen tales ayudas”. ¿Siempre en la inopia quienes deben formular y aplicar prioritariamente soluciones para el bienestar de la población? Así pues, y, ante hechos lapidarios en derredor, se activa “el mecanismo de defensa más primitivo que consiste, como se sabe, en negar la realidad a la cual uno no puede adaptarse” –frasea el médico francés Louis Corman-.

En el Paìs valenciano “necesitamos con urgencia que el protocolo  de detección y atención sanitario  para el TDAH”, ese “que las Cortes Valencianas  aprobaron en dos mil diecisiete –¡hace ocho años!- viese la luz cuanto antes, la última noticia que tenemos  es del mes de junio pasado en la que Consellería de Sanidad ha prometido  que verá la luz el próximo mes de febrero.¡ Ojalá esta vez sea verdad! Porque son tantas veces las que ha prometido la Administración  su publicación  que hasta que no lo  veamos  no nos lo podremos creer” .¿En algún momento quienes rigen la gobernanza atisban cualquier ramalazo de angustia por culpabilidad en su gestión?

¿Por qué no se programa proyectar  algo de luz  sobre este trastorno  en espacios ciudadanos y abandonar la espiral de desinformación estigmatizadora? “Se nos sigue excluyendo en infinidad de circunstancias, los comportamientos infantiles que puede presentar el trastorno en un adulto no es tolerable por nadie”. El escritor y filántropo neerlandés  apodado Multatuli (traducción del latín: “mucho he sufrido”) declararía: “En mi sentir se encubren excesivamente algunas cosas”, cosas malinterpretadas generalmente.   ¿La sociedad admite la adultez con TDAH? “¡Para nada! Se nos tacha de personas mal educadas, vagas. Nada más lejos  de la realidad. La impulsividad muchas veces nos lleva a tener comportamientos diferentes que en muy pocas ocasiones son considerados convencionales”.

TDAH y mundo laboral es una fórmula evidentemente compatible, el trastorno con su hiperactividad motora  y creatividad en un adulto, “lo hace un trabajador incansable”. ¿Se cuenta con respaldos parala inserción? “¡Ninguno! sería  de vital importancia que existieran, es necesario que el ámbito laboral se forme  para tener trabajadores con  nuestra características en plantilla. ¡Siendo bien tratados podríamos rendir el doble que cualquier otro trabajador!”.¿Qué hacen algunos departamentos de recursos humanos que no indagan en otros perfiles dejándose de barruntos mojigatos? “La incomprensión  del trastorno  en todos los ámbitos de nuestra vida” es manifiesta. ¿Relaciones sentimentales, sexuales, familiares? “Todas las relaciones son difíciles  exactamente por lo mismo”. La psicóloga y escritora  italiana  Paola Santagostino apunta que: “Aceptar con alegría que somos felizmente imperfectos es una bendición”, a lo que añadir lo dicho por el aludido Corman, creador de la morfopsicología: “Todo ser desea la felicidad”.

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