Textos: Ángeles Sanmiguel
Voces que viven en pompas de intolerancia desacreditan sin despeinarse a la denominada “generación de cristal”, una juventud a la que ni conocen ni les interesa saber de sus luchas por los derechos, pero,nuevamente, la realidad les ha puesto en su sitio.Apabullante ha sido y es la respuesta solidariade miles de jóvenes tras el cataclismo de la Dana en el País Valencià. “Esos chavales son puro corazón, vienen con sus escobas, con sus palas” exclama el vecindario afectado. “¡Esta gente se merece el Cielo!”.
¿Por qué en circunstancias catastróficas, en pleno drama, se ejecutan desahucios como el deAlgemesí? “Estem mol fotuts i moltcansats” confiesa José Luis de la PAH (Plataforma de Afectados por la Hipoteca).“Las fases del morir se viven también al abandonar la casa en la que vivieron décadas, al perder un animalito doméstico”, confesaba la psiquiatra suiza Elisabeth Kübler-Ross.Animales de compañía arrancados de sus humanos por la violencia del agua y el lodo se han ubicado en el SportingBenimaclet CFde València, un campo de fútbole instalaciones, dondepoder ser atendendidos,con una organización digna de encomio, esos otros animalesheridos por dentro y por fuera.“El estado meteorológico del tiempo a menudo guarda estrecha relación con el sentir de los animales y lo que se dicen unos a otros”, afirma el licenciado en Biología, articulista y editor estadounidense Vinson Brown.Inconmesurable es la cantidad de esos otros animales que hanperdido el aliento bajo el fango, arrastrados por la riada, embarrados. Con el efectivo voluntariado humano llevándoles a buen resguardo, dándoles alimento y agua limpia. Los supervivientes –en mayor número animales domésticos- han vuelto a calentar sus cuerpos temblorosos recibiendo el afecto desinteresado de cuadrillas ejemplarizantes. Asustados los animales rescatadosesperan, con la mirada perdida y añorantes de sus hogares,el reencuentro con sus venerados seres humanos. Volcadoen una de las devastadas carreteras yacía un camión repleto de gallinas hacinadas,destinadas al atroz fin del matadero, allí,expirando, atrapadas, rodeadas por cadáveres de congéneres, su destino finalmente fueel sacrificioexcepto cinco gallinas que María Jesús de València Animal Save logró rescatar.Prontamente se activaron reubicaciones en otras protectoras, traslados a lejanos refugios, acogidas domésticas ydonaciones de alimentos y mantas junto a la altruista atención veterinaria. Colonias felinashan sido tragadas como en un relato fantástico del escritor estadounidense Lovecraft. Un pozo de un polígono industrial “ha chupado los animales, camiones, coches, plantas, paredes, la tierra estaba a la altura de la acera y se ha quedado bajo la acera un metro y medio, todo está tragado ahí, se ha reventado el pozo y no habrán tenido tiempo de salir los gatitos, ahora esta colonia está enterrada” comentaZahracuidadora responsable de varias colonias felinas, en una de ellas “se salvaron la mitad” informa.Días antes de la tragedia habían “acomodado casitas con mantitas”y “ya no hay nada, no les queda nada, han pasado hambre, ahora estoy rescatando”.
“Tenemos que salir adelante como sea” clama una mujer mayor.
Un bombero define el escenario como “sobrecogedor, abismal”. Cientos de declaraciones tratan de describir lo indescriptible: “Un escenario de zona de guerra”. “Una película de miedo”.“No se puede decir con palabras”. “Descoordinación total”. Joan Escribà director de la revista infantil “Camacuc” ante la tragedia no se arredró y al igual que la citada anciana valerosa piensa retomar la labor de la revista infantil aunque sólo “han quedado las paredes” y “me he quedado sin mi vida artística”.Angustia y desesperación bullen y palpitan entre las víctimas de la Dana (Depresión Aislada en Niveles Altos). ¡València jamás olvidará! Cada segundo que pasa desde el fatídico martes veintinueve de octubre, el proceso de descomposición y la entelequia inventada por parte de la Generalitat se acrecientan pero: “¡València tenemos que salir adelante como sea!”. Con la caja de Pandora abierta de par en par el pueblo está unido en lo importante, en el apoyo mutuo,demostrando que ante cualquier ruina posee la capacidad de esperar.
El veintitrés de noviembre la “Plataforma per l´ensenyamentpúblic”, sindicatos y Ampas (Asociación de Madres y Padres de Alumnos) unidos a miles de víctimas, se manifiesta contra la nulidad y atrocidad de las gestiones en la gobernanza valenciana además en el ámbito educativo. “Mazón i Rovira (Consellerd´Educació, Cultura, Universitats i Ocupació)dimissió!”.
Verdugos, capitostes déspotas, espantajos y equipos lamebotas han cruzado la línea roja en el País Valencià. Ni sarta de mentiras, ni alucinantes juegos de excusas ni señalamientoscomo evasiva sirven. ¿Qué fórmula mágicacreen poseer títeres trepas?“Que no nos toquen los cojones” comenta un vecino de la capital del Turia. Ahora con miles de millones de euros en el horizonte para la reconstrucción, ¿ya en danza artilugios escamoteadores? ¿Departamentos para la derivación? “¡Mazón dimisión!”. La incompetencia mata. La avaricia mata. La falta de sentimientos mata. Algunos partidos políticos matan. Por mucho que se enrede, se trate de manipular, de confundir, en el siglo veintiuno, los “sillones” son rehenes de la videoteca.“¡Mazón, dimitir no es una palabra rusa” esgrime una pancarta.
Antonio Damásioneurocientífico portugués especificaría: “No creo que se pueda tener conciencia sin sentimientos”. ¿Por qué ningún gobierno estatal o comunitario ha invertido en prevención y educaciónde forma persistente a la ciudadaníadesde la etapa escolar, y a empresas, con persistentes y rígidas inspecciones ante las catástrofes,tal como sucede en Estados Unidos? Las alertas deben lanzarse cuantas veces sean necesarias aunque no se desarrolle el cataclismo predicho. ¿Afán por una desinformación tercermundista? ¿Morir bajo los cascos de ciertas políticas trastornadas? Eduardo Punset, ex ministro para las Relaciones con las Comunidades Europeas, ya escribió que “a los políticos y a las instituciones les gustaría influir en los principios morales o cívicos de un colectivo o de una nación”, para ello, nada tan resolutivo como la manipulación.
“Tenemos que salir adelante como sea”. A pesar de Mazón, su séquito y sórdida parentela de negocio.
¿Por qué durante décadas la gobernanza del Paìs valenciano no ha atendido los mantenimientos de barrancos, ramblas, cañadas, riachuelos, hoyas y cauces aminorando en todo lo posible la malignidad de pavorosas avenidas pluviales, escorrentías e inundaciones? La mencionada médica helvética también sentenciaría que “somos culpables de haber destruido muchos dones de la Naturaleza”. ¿Dónde y cuándo se perdió el innato sentido que pueblos primitivos tenían de utilizar y no abusar de la Naturaleza? En poblaciones ancestrales hasta los árboles eran oráculos –cleromancia-, actualmente, en las ciudades, son considerados simples elementos urbanos, se arrasan bosques, pinares, selvas, mientras movimientos ciudadanos abanderan “ni una tala más, ni una hoja menos”, “Que se deje de construir un urbanismo descontrolado a espaldas de la Naturaleza y que se deje de sepultar bajo cemento, adoquines y zahorra nuestro suelo natural, el de nuestras ciudades, parques, ecosistemas urbanos y periurbanos” wasapean. Otra cumbre del clima, -cumbre económica-, COP 29 se ha celebrado. ¿Campamento de reclutamiento para el Armagedón?
¿Por qué cualquier “Popeye” de cuello blancoes inmune? “Como ciudadanía nos merecemos algo mejor” declaró radiofónicamente un médico. ¿Cuándo abandonarán las riendas del proselitismo político agentes fulleros, charangueros y peleles psicópatas? Cierto conocido periodista declararía que tienen “miedo a que la gente se cabree”. “¡Mazón dimisión!”.
“València tenemos que salir adelante como sea”.
Tras la tragedia, las endorfinas dejarán de “ejercer su benéfica misión” y el dolor surgirá activando el denominado por el psiquiatra BenjaminSimon “cuarto oscuro”, la laguna amnésica. Una usuaria refiriéndose a cierta entidad zonal de trastornos graves de salud mental comentaría radiofónicamente que “menos mal que venían a casa” desde dicha asociación. Los equipos de psicología desplegados en las poblaciones damnificadas se enfrentan a una experiencia profesional que les traspasa como nunca hubiesen imaginado necesitando asimismo ayuda psicológica. “¡Mazón dimisión!”.
“Tenemos que salir adelante como sea”.
Una empresa del sector moda para la plantilla afectada “ha hecho un paquete de medidas,catorce personas han perdido sus casas o no pueden entrar en ella entonces les ha pagado un Airbnb (alojamiento amueblado), hay treinta y seis coches afectados y les va a pagar durante tres meses un renting (alquiler de coche)”, han tramitado “ayuda psicológica ilimitada en una empresa de psicología online y habilitado microcréditos al cero por ciento de interés, adelanto de nóminas, adelanto de pagas, también están haciendo un crowdfunding (micromecenazgo) entre los trabajadores de toda España ypor cada euro que done un trabajador, la empresa dona tres hasta llegar a trescientos mil euros”, en breve instituirá una comisión “para ayudarles en lo que sea con ese dinero”. Quien no pueda ir a trabajar “porque tienen niños sin colegio, porque su casa está afectada, porque tienen familiares desaparecidos, son permisos retribuidos”, informa una trabajadora de dicha compañía.
“Tenemos que salir adelante como sea”.
“Aislado en esta pena, enfermo y aguardando cada día por la muerte y cercados”, escribiríaCristóbal Colónal embarrancar cerca de la actual Jamaica en epístola dirigida a los Reyes Católicos. Actualmente, saltando el espacio-tiempo, tal estado es ajustado a lo sentido por las víctimas de la Dana.“Si no viene a ayudar que no venga. Que se quede en Madrid haciendo su papelón y deje de cebarse con el dolor ajeno. Fuera hipócritas de la gestión de las vidas públicas. Fuera de nuestros días llenos de horror y desconcierto, fuera Feijoo del País Valencià”, se lee en redes sociales. “¡Mazón dimisión!”.