Estefanía Blanes: «según nos han informado expertos, el problema ha podido desencadenarse a raíz del desmunt de la fábrica, en la cual había muros que se han afirmado que eran simplemente de masonería o de revestimiento pero que, tal como se ha demostrado, podrían ejercer como muros de contención«
El cierre de un carril en la avenida de Alicante, la conocida como La Beniata y el derribo de Maquinaria Ceras ha sido toda una serie de despropósitos y de ejemplo de mala gestión política que Guanyar Alcoi viene denunciando desde hace un año.
A agosto del año pasado la plataforma ciudadana criticó la falta de diligencia y de información sobre plazos concretos en la obra y reapertura del carril cerrado desde abril de 2015.
En aquel momento ya se tardó un año y cuatro meses (desde abril de 2015 con la declaración de ruina, hasta septiembre de 2016) en dar una solución, aunque precaria, a La Beniata.
«Estamos aseverando en un continum de despropósitos por lo que respeta a La Beniata», afirma la Portavoz del Grupo Municipal Guanyar Alcoi Estefanía Blanes, que muestra su incredulidad por la situación actual: «según nos han informado expertos, el problema ha podido desencadenarse a raíz del desmontaje de la fábrica, en el cual había muros que se han afirmado que eran simplemente de masonería o de revestimiento pero que, tal como se ha demostrado, podrían ejercer como muros de contención«, es por esto que la Portavoz considera que «puede haber sido temeraria» la demolición de Maquinaria Ceres. Han aparecido algunas tesis en el Ayuntamiento sobre que las consecuencias del derrumbe eran las últimas construcciones de ampliación de la Universidad, sin embargo desde la plataforma ciudadana difieren de estas tesis y señalan que «hay una consecuencia de causa efecto muy clara, meses después de la demolición de Ceres, se produce el derrumbe. No creemos que sea un suceso casual teniendo en cuenta que desde los años 80 la vertiente se había mantenido estable y no había tenido movimientos bruscos. Además la Universidad había realizado un estudio geotècnico que acreditaba que los terrenos eran estables y que la construcción de la ampliación no supondría ningún peligro en la vertiente ni en los terrenos colindantes«, explica la Portavoz.
Blanes hace memoria al respeto y afirma que «no sólo se hubiera podido incurrir en errores al derribo, sino que toda la gestión para tumbarlo ha sido tremendamente lenta teniendo en cuenta que desde mayo de 2015 se declara el estado ruinoso del edificio y hasta un año después no se actúa. Precisamente las administraciones no han sido lo diligente que se espera de ellas y, si se hubiera actuado con más agilidad y urgencia, el problema con los cortes de carriles y la acumulación de tránsito debido al cierre del puente, podría haberse aligerado«.
«Nos llama la atención que al proyecto de demolición no se hace un análisis de la situación previa, es decir, saber por qué el edificio se encontraba en esta situación y las consecuencias que nos han traído al tener que derrocarlo; cómo tampoco se hace referencia al estudio del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), en el que se contempla de forma muy exhaustiva y completa el comportamiento de las vertientes y de las tierras de Alcoi en general. Hubiera sido interesante, en este aspecto, haber realizado un análisis sobre la situación para evitar en un futuro posibles desprendimientos«, afirma la Portavoz.
Es por lo tanto que desde Ganar Alcoi consideran que «el PSOE no ha actuado con la celeridad que se debía de y ahora nos encontramos con un problema sobrevenido, después de un derribo de Maquinaria Ceres realizado presumiblemente de forma deficiente y que habría provocado el derrumbe actual; actualmente la situación es del todo kafkiana, teniendo que certificar la seguridad de toda la vertiente», señala Blandas, y añade que «una muestra de la falta de diligencia palmària fue cuando en enero de este año se pide poder realizar una actuación urgente a los terrenos de la UPV donde se había producido parte del derrumbe y, por culpa que las comunicaciones se realizan con la dirección de Valencia y no con la de Alcoi, la actuación urgente se retrasa 4 meses y no se actúa hasta mayo«.
La Portavoz remarca que «ahora, como consecuencia de todos estos despropósitos, tenemos que contratar a una empresa externa para que nos haga un informe favorable y nos gastemos más dinero público y más tiempo para remediar este auténtico despropósito que hace más de 2 años que sigue sin solucionarse. No estaría de más que el responsable político, el regidor Manolo Gomicia, explicara todos estos errores seguidos e informe a la ciudadanía sobre plazos de forma creíble«.