En esta moción registrada esta mañana pero que se dictaminará en el pleno del 31 de octubre, también insistimos en la problemática que suponen los delitos de odio cada vez más frecuentes, cometidos por organizaciones ultras en nuestro territorio.
Juanjo Llorente, concejal portavoz de EU Verds señala: “La escalada autoritaria de la derecha que podemos constatar en Cataluña, en realidad llega a todos los rincones de nuestra geografía, de la mano de una serie de organizaciones que se reclaman franquistas o nazis abiertamente. Los Ayuntamientos tienen una labor muy importante de seguimiento de esta escalada y sobre todo de sensibilización ciudadana contra una lacra que amenaza seriamente nuestra convivencia, así como los derechos y libertades conseguidos tras la muerte de Franco”
“Confiamos, dice finalmente Juanjo Llorente, en que el Ayuntamiento de Aldaia apoye esta moción y comience a actuar frente a un problema que todo indica que va a seguir creciendo”.
Texto íntegro de la Moción:
«Moción de condena institucional a las agresiones fascistas del 9 d’Octubre y por la depuración de las responsabilidades públicas
Los concejales y grupos municipales abajo firmantes, al amparo de lo dispuesto en el Reglamento de Organización de las Entidades Locales, presentamos para su aprobación la siguiente moción.
EXPOSICIÓN DE MOTIVOS
“La vesprada del 9 d’Octubre es va realitzar la tradicional manifestació. Enguany sota el lema “Sí al valencià”, per a defensar la nostra cultura i els interessos dels valencians. El que jo vaig veure i patir, en la part davantera de la manifestació, em va recordar altres fets viscuts fa 40 anys (¿como la que fue llamada en la prensa “batalla de Valencia”, a finales de los años 70?). (Una vegada va començar la manifestació…) Es creua algun que un altre provocador. Als costats es van encarar uns altres amb algunes banderes espanyoles. La resposta, “silenci y passant d’ells”. Havien d’intentar rebentar la manifestació per altres mitjans.
En el carrer Colom aquests reaccionaris fan intents d’agressio i constants insults i provocacions. La resposta que van obtenir va ser alçar les nostres veus, perquè s’escoltara alt i clar, “democràcia” i “som gent de pau”. Van intentar fer callar les nostres veus des d’alguna finestra donant-li a les casseroles. I la Policia sense fer res. Aço sí, quan haviem d’arribar al Panterre, ens van desviar cap a la plaça Amèrica, ja que els fexistes l’havíen ocupat, i clar, no eren catalans volent votar. Només quan aquests exaltats van intentar anar a per totes van fer un cordó perquè no passaren.
Senyor delegat del Govern, Juan Carlos Moragues, si li queda una poca vergonya, denuncie als comandaments que van permetre l’atropellament als drets dels ciutadans i després dimitisca”.
Esta sentida crónica de lo sucedido el pasado 9 de Octubre, escrita en primera persona por un participante directo (Joan Martí i Serra, de Valencia), muestra claramente hechos frente a los que no cabe permanecer impasibles. No es suficiente limitarse a echar balones fuera lanzando vacuas proclamas. Hay que depurar responsabilidades aunque sólo sea para prevenir y poner cota a la escalada fascista que asola nuestro país y continente. Según el informe Raxen de Movimiento contra la Intolerancia, en el año 2016 se registraron agresiones por odio cada cuatro días en la Comunidad Valenciana. Uno de esos episodios, de especial virulencia, se produjo la tarde del 9 de Octubre, cuando los fascistas agredieron sin recato a viandantes e incluso algún periodista que estaba cubriendo la manifestación de Valencia.
Considerando que siempre corresponde a los poderes públicos la lucha y denuncia activas contra cualquier tipo de fascismo, racismo, discriminación racial, xenofobia y cualquiera otra forma de intolerancia social. Considerando, además, que la Administración Local, como ocurre con buena parte de los sucesos que transcurren en el día a día, es la que suele sufrir de forma más directa este tipo de problemas y sobre la que recae la función crucial de prevención y sensibilización de la opinión pública contra los enemigos de la democracia, los abajo firmantes presentamos las siguientes.
PROPUESTAS DE ACUERDO
1.- Este Ayuntamiento acuerda condenar los actos violentos ocurridos el pasado 9 de octubre en Valencia. Pues se trata de actos de intolerancia y violencia que solo buscan erosionar la convivencia y bloquear la libre manifestación y ejercicio de las libertades.
2.-Este Ayuntamiento también acuerda instar a todas las Instituciones públicas para que realicen una aplicación diligente de la ley y mantengan una especial sensibilidad, vigilancia y contundencia contra este tipo de comportamientos y de actitudes antidemocráticas y de tinte fascista.
3.- Pedir la dimisión del delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, por no garantizar la seguridad y el derecho de manifestación en una convocatoria informada a su Delegación, así como por permitir la contramanifestación no informada de la extrema derecha, sin que las fuerzas de Seguridad actuaran preventivamente.
4.- Dar traslado de estos acuerdos a los grupos parlamentarios de les Corts Valencianes y del Congreso de los Diputados y Diputadas.
5.- Dar traslado igualmente al Ministro del Interior y a la Ministra de la Presidencia así como a las Administraciones Territoriales.»
